Las ventas al exterior de porotos de soja pasan de 33% a 26% –se reducen un 21,2 por ciento– en forma transitoria y para aliviar la caída de precios internacionales y los efectos de la prolongada sequía. Sí será definitiva la quita de derechos de exportación a las economías regionales, un largo reclamo de sectores específicos. La medida entra en vigencia este lunes
«Queríamos darle una señal al campo», dijo el ministro de Economía, Luis Caputo y anunció la atención de uno de los reclamos que cada vez con voz más fuerte estaban llegando a la Casa Rosada: la baja de las retenciones a las exportaciones de granos y oleaginosas. La decisión –aclaró el jefe de Hacienda– no es definitiva sino hasta junio, y en el caso de la soja en porotos los derechos de exportación pasan del 33% al 26%, y en aceite y derivados de soja del 31% al 24,5%. Sí, en cambio, habrá una quita, no una rebaja, y será definitiva para las economías regionales, atendiendo desde este lunes un largo reclamo de diferentes sectores como el vitivinícola y olivícola, entre otros.
La semana pasada la mesa de enlace había pedido una reunión al gobierno, a la par que emitió un comunicado en el que exigía la eliminación de las retenciones, ante la caída de los precios internacionales de los commodities, y de la sequía que afecta a todo el territorio nacional, especialmente en la Zona Núcleo.
La respuesta llegó este jueves con una baja para el cultivo estrella del país de un 21,2%, de forma transitoria y con la explicación por parte de Caputo que será hasta mitad de año, ya que de otra manera comprometería el equilibrio fiscal. «La razón por la que no podemos hacerlo permanente es porque no tenemos los recursos. Pero sí queríamos darle la señal al campo, particularmente que es un sector que tanto apoya al país, que estamos encima de su situación. No nos es indiferente», marcó el ministro.
En esa línea, la rebaja alcanzará también a otros de los principales cultivos: las exportaciones de trigo pasarán de 12% a tener una alícuota del 9,5%, al igual que el maíz, la cebada y el sorgo; para el girasol pasa del 7% al 5,5%, y para las economías regionales 0%, con alcances a productos tales como azúcar; preparaciones alimenticias; algodón; cuero bovino; bebidas; ovinos (lana y cueros); tabaco; forestoindustria; arroz; maní; golosinas, chocolates y otros.
A la par, Caputo hizo un repaso de la gestión económica del gobierno de La Libertad Avanza a modo de autoelogio y con afirmaciones que sorprendieron: proclamó que se había bajado la inflación en forma histórica y que ese éxito había generado una caída de la pobreza de un 20%, algo que no parece condecirse con la realidad ni con ninguna medición, sea oficial o privada.
En una conferencia de prensa, el ministro de Economía Luis Caputo y el vocero presidencial Manuel Adorni anunciaron la baja a retenciones al campo y que se eliminarán para las economías regionales.
«El presidente siempre ha dicho que el campo era una prioridad», dijo Caputo, para destacar: “Este gobierno vino a bajar impuestos”.
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