El resumidero del baño suele acumular suciedad como pelos, restos de jabón y piel muerta, lo que puede generar malos olores y obstrucciones en las cañerías. Para evitar el uso de productos químicos agresivos y tóxicos, se recomienda un método casero y seguro.
El truco consiste en mezclar ½ taza de vinagre blanco con ½ taza de bicarbonato de sodio, verter la mezcla en el desagüe y dejar actuar entre 30 y 40 minutos. Luego, se debe verter agua hirviendo para arrastrar la suciedad y liberar el paso del agua.
Antes de aplicar esta solución, es fundamental remover la rejilla del resumidero y retirar manualmente cualquier residuo visible. Para prevenir futuras obstrucciones, se sugiere usar protectores para el desagüe que bloqueen el ingreso de cabellos y restos sólidos.
Este sencillo procedimiento permite destapar el resumidero y eliminar el mal olor en pocos minutos, de forma económica y sin dañar las cañerías ni poner en riesgo la salud.