Dan a conocer el veredicto por la muerte de dos modelos argentinas en un choque en Punta del Este

Compartir

Fue planificado con mucha anticipación y expectativa. Se vislumbraba como un encuentro inolvidable. Dos amigas que residían en México y dos de Buenos Aires, que se encontrarían en Punta del Este para recibir el Año Nuevo de 2023 y pasar juntas unos días de vacaciones.

Pero todo mutó en pesadilla en el mediodía del 4 de enero de ese año, cuando en un incidente vial registrado ese día en el kilómetro 1 de la ruta 104 de Manantiales (departamento de Maldonado, cerca de Punta del Este) murieron las modelos Josefina Ferrero (27) y Micaela Trinidad (26) quienes viajaban junto a otras dos jóvenes en un Ford Ka. Eran las cuatro amigas argentinas del proyecto que debía ser inolvidable.

El conductor del otro vehículo con el que chocaron de frente a alta velocidad, también es Argentino: Nicolás Rocca, quien desde entonces está con prisión domiciliaria con régimen abierto en Uruguay. En el Volkswagen Nivus que manejaba Rocca viajaban también Nazarena Sierra, Milena Antún, Josefina Elissondo y Juan Pablo Centero.

A dos años y medio de esa tragedia vial, que también dejó lesiones y secuelas en otros jóvenes que viajaban en los autos, la Justicia uruguaya finalizará el juicio al conductor, imputado por “homicidio culpable y lesiones”, un delito que en el Código Penal del país vecino contempla pena máxima de hasta 8 años de cárcel.

Eso fue lo que requirió el fiscal de juicio, Sebastián Robles, en su alegato final y que convalidaron los abogados del resto de los damnificados. Este martes 29, la jueza Gabriela Azpiroz -quien reemplazó al magistrado que comenzó esta etapa del proceso- deberá dar a conocer el veredicto y la sentencia.

Para los familiares de las víctimas y para las amigas que volvieron a su casa después de ese verano de horror, será el cierre de una etapa de sufrimiento.

Los dos autos involucrados en el choque frontal quedaron mirando para el mismo lado.

Ferraro y Trinidad iban acompañadas de Melanie Larraburu y Camila Palacios, quienes terminaron con severas lesiones. Larraburu estuvo internada en Punta del Este y la trasladaron en avión sanitario. Fue sometida a una operación que se extendió por ocho horas. “Le colocaron cuatro placas y 38 clavos de platino en la cadera. Hizo meses de rehabilitación y tuvo que abandonar sus actividades en Mexico y volver a la Argentina”, dijeron a Clarín en el entorno familiar de esta mujer de 29 años. Después de esa cirugía, estuvo tres meses sin caminar.

La última intervención fue hace un mes, mientras al otro lado del río se sustanciaba el juicio. Deberá continuar con la rehabilitación.

Palacios estuvo 50 días en coma, un mes sin caminar y atravesó varias de intervenciones y todavía la quedan pasajes por tratamientos para culminar la recuperación.

Ambas tuvieron que atravesar por prolongados y dolorosos tratamientos para superar las secuelas de las severas lesiones. Ahora dirigen emprendimientos vinculados con servicios de belleza y promoción. “Pero nunca pudieron retomar su vida con normalidad: están pendientes de turnos, tratamientos y rehabilitaciones”, reconocen sus allegados.

Josefina Ferrero era modelo.

En marzo comenzó el juicio y el 7 de mayo se realizó la última audiencia. Declararon 18 testigos propuestos por el fiscal y por la defensa de Rocca (los abogados Pablo Donnángelo y Eduardo Sasson) y por los representantes de las víctimas, el penalista y senador Andrés Ojeda (ex candidato presidencial) y Joaquín Abal.

Los letrados de las víctimas esperan que “por tratarse del fallecimiento de dos personas y consideramos justificado la aplicación de la pena máxima”, dijo Ojeda a Clarín.

Se debatió en el juicio y se aportaron pericias y datos técnicos para determinar cómo fue y quién resultó responsable de la maniobra que terminó en un choque frontal. El punto central: quién se desvió de su mano para provocar el impacto.

Ambas partes sostienen que fue Rocca, el conductor del Nivus. Los defensores de Larraburu y Palacios aportaron elementos reveladores: una pericia muestra las hendiduras de los metales en el asfalto del lado en el que viajaban las chicas. Porque después de la colisión ambos vehículos quedaron desplazados y mirando hacia el mismo lado.

Micaela Trinidad también se dedicaba al modelaje.

“Además, la declaración de un testigo que viajaba en el auto de Rocca y confirmó que él se cambió de senda”, dijo el abogado a este diario. También aportaron un video donde se ve al joven en un “after” el día del choque. Había declarado que ese día habia estado trabajando.

Se detectaron rastros de alcohol y drogas, aunque en el juicio se presentaron análisis que determinaron que eran residuos que habían quedado en el organismo, o sea que Rocca no estaba en ese momento bajo efecto de estupefacientes.

Otro dato que se reveló en el trámite oral que terminó el 26 de junio, es que Rocca tenía el carnet recién emitido. “No tenía experiencia en conducir y la libreta que tenía no le permitía manejar en rutas. La causa directa del episodio es por un factor humano, un error, una mala decisión, un mal cálculo. Todo esto apunta a que la responsabilidad es de Rocca”, dijo el abogado de las chicas y de la familia de las fallecidas.

Micalea y Josefina, que murieron casi en el acto, después del tremendo impacto cumplían años el mismo día: el 27 de junio, pocas horas después de la última audiencia. Un malicioso guiño del destino. Un mes después se sabrá si hay una condena para quien, se presume, sería el responsable del último aliento de estas chicas.

La Plata. Corresponsalía

MG

Noticias Relacionadas