Los animales domésticos requieren de cuidados especiales en las épocas frías del año en donde desde cachorros a adultos sufren las bajas temperaturas.
El invierno presenta desafíos particulares para el cuidado de las mascotas. Las bajas temperaturas afectan de manera distinta a cada animal según su raza, tamaño y condición física. Los profesionales veterinarios de la dirección de zoonosis de Ushuaia alertan sobre los peligros que representa el frío intenso para perros y gatos. Aunque proviene de una provincia con fríos más crudos que en Buenos Aires, estos consejos son aplicables a toda la Argentina.
Las temperaturas inferiores a los siete grados constituyen un riesgo para muchas mascotas. Los canes de pequeño tamaño o con pelaje corto muestran mayor vulnerabilidad debido a su escasa reserva de grasa corporal. Los cachorros, animales mayores y aquellos con problemas de salud requieren cuidados especiales durante esta estación.
Los consejos para cuidar del frío a tus mascotas
Los expertos en salud animal recomiendan implementar medidas específicas para resguardar a las mascotas del frío. Las prendas de abrigo para perros resultan particularmente útiles para razas pequeñas o de pelaje corto. Se aconseja seleccionar materiales confortables y de fácil colocación.
El momento de los paseos merece especial consideración. Los veterinarios sugieren evitar las salidas en los períodos más fríos del día, como las primeras horas matutinas o el horario nocturno. La última caminata diaria debería realizarse antes de que anochezca.
La nutrición desempeña un papel fundamental en el bienestar invernal de las mascotas. Los especialistas recomiendan consultar con el veterinario acerca de posibles modificaciones en la alimentación. Algunos animales pueden requerir un mayor aporte energético para mantener su temperatura corporal.
El área de descanso de la mascota necesita consideraciones especiales. Los profesionales veterinarios aconsejan que los perros duerman dentro del hogar o en espacios protegidos del frío intenso. Para aquellos que lo hagan al exterior, se debe ubicarse en un lugar resguardado de las corrientes de aire.
La condición física general de la mascota demanda supervisión constante. Los chequeos veterinarios periódicos permiten identificar a tiempo enfermedades que podrían agravarse con las bajas temperaturas.
Fuente: SFA/Ambito