El misto es una pequeña ave que se distingue por reunirse en grandes bandadas durante el invierno y que, gracias a esto, los cielos se llenan de pajaritos volando en grupo y se protegen entre ellos, debido a que anidan en el suelo. Pero, ¿qué es lo que los hace tan distintivos?
Estos pájaros prefieren migrar en grupos compactos para protegerse de posibles depredadores y tienen un canto muy particular, que adornan los silencios del invierno en los países de Sudamérica, especialmente en Argentina, Uruguay, Paraguay, Bolivia y Brasil.
Su nombre científico es Sicalis luteola, proveniente de la familia Thraupidae y es bien distinguido por su plumaje amarillo brillante y un alegre sonido. Además, es un ave muy llamativo y sociable que suele encontrarse en los paisajes más rurales.
Estos pequeñines guardan un comportamiento y una costumbre que los vuelven seres fascinantes, ya que durante el invierno, se mueven en grandes bandadas para buscar comida y refugio, convirtiéndose en un espectáculo en sí mismo.
El Misto, un ave que trae alegría al invierno
De acuerdo a la Sociedad Española de Ornitología, el misto cuenta con denominaciones muy populares con relación a las distintas regiones americanas que habita, tales como Canario Sabanero (Colombia), Pinzón Amarillo (Honduras y Nicaragua), Chigüi (Argentina, Paraguay y Uruguay) y Semillero Chirigüe (Venezuela).
Además, una de las particularidades más destacadas del misto es su forma de construir un hogar, ya que a diferencia de otras aves, elige el suelo o zonas muy bajas para ocultar su nido entre los pastos y arbustos. Esta elección, aunque riesgosa por la exposición a depredadores, se compensa con un camuflaje eficaz y una ubicación cuidadosamente elegida.
Por otro lado, su reconocible plumaje y canto enérgico visten de alegría los tonos fríos del invierno. La hembra, a diferencia del macho, presenta un color más apagado para poder pasar desapercibida durante la incubación de los huevos.
Su dieta, basada en semillas, brotes y pequeños insectos, le permite sobrevivir incluso en épocas de escasez, donde las temperaturas bajan de forma extrema, sobre todo en el campo.