El Vaticano dijo que el cuadro clínico sigue siendo complejo, aunque «no existe ningún peligro inminente».
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El papa Francisco, de 88 años, continúa su recuperación en el Hospital Gemelli de Roma, Italia, tras ser hospitalizado el 14 de febrero debido a una neumonía bilateral.
Según el último comunicado del Vaticano, su estado ha mostrado una «mejoría consolidada» y ya no se encuentra en «peligro inminente».
A pesar de estos avances, los médicos han decidido que el Santo Padre permanezca hospitalizado para asegurar una recuperación completa.
Su salud se estabilizó
«Las condiciones clínicas del Santo Padre siguen siendo estables. Las mejoras registradas en los días anteriores se han consolidado aún más, como confirman los análisis de sangre, la objetividad clínica y la buena respuesta a la terapia farmacológica. Por estas razones, los médicos han decidido hoy disolver el pronóstico (de estado crítico)».
Continuar con la terapia médica
«Sin embargo, dada la complejidad del cuadro clínico y el importante cuadro infeccioso presentado en el momento del ingreso, será necesario continuar la terapia médica farmacológica en régimen hospitalario durante algunos días más», informó la Oficina de Prensa de la Santa Sede difundido en la tarde de este lunes 10 de marzo.
Levantan el estado reservado
Desde su ingreso, Francisco ha recibido tratamiento intensivo que incluye oxigenoterapia de alto flujo durante el día y ventilación mecánica por las noches. Estas medidas han contribuido a estabilizar su condición y mejorar su función respiratoria.
Los análisis de sangre recientes indican una respuesta positiva al tratamiento farmacológico, lo que ha llevado a los médicos a levantar el pronóstico reservado que mantenían desde su ingreso.
No existe peligro inminente
«Se trata, por tanto, de signos positivos en el transcurso de la enfermedad, que, no obstante, deben acogerse con cautela y prudencia, ya que la neumonía aún no ha terminado y el cuadro clínico sigue siendo complejo, aunque no existe ningún peligro inminente», concluye el boletín informativo sobre el estado clínico del Papa.
Actividades desde el hospital
A pesar de su internación, el Papa Francisco ha continuado con algunas de sus responsabilidades desde el hospital.
Ha seguido los ejercicios espirituales de la Curia por videoconferencia y ha recibido visitas de altos funcionarios del Vaticano, manteniéndose informado sobre asuntos críticos de la Iglesia y del mundo. Por la tarde, alternó la oración y el descanso.
Asimismo, este domingo, Francisco volvió a pedir por la paz en distintos conflictos globales.
«Juntos seguimos invocando el don de la paz, particularmente en la atormentada Ucrania, en Palestina, en Israel, en el Líbano y Myanmar, en Sudán y en la República Democrática del Congo», escribió en su mensaje.
También manifestó su preocupación por la reanudación de la violencia en algunas zonas de Siria y pidió respeto por todas las comunidades afectadas.
El voluntariado es una profecía
Además, el pontífice destacó la importancia del voluntariado, en el marco de la santa misa celebrada en la plaza San Pedro por el Jubileo del mundo del voluntariado.
«En nuestras sociedades demasiado subordinadas a la lógica del mercado, el voluntariado es una profecía y un signo de esperanza», afirmó.
Agradeció la dedicación de los médicos
Por último, agradeció a quienes se dedican a cuidar de los enfermos y expresó su propia experiencia en el hospital. «En mi prolongada hospitalización, experimento la ternura y la dedicación de los médicos y agentes sanitarios, a quienes agradezco de todo corazón», sostuvo.
El milagro de la ternura
Y concluyó con un pedido: «Necesitamos el ‘milagro de la ternura’, que acompaña a quien está en la prueba, llevando un poco de luz en la noche del dolor».
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