Condenaron a un psiquiatra y un instructor de tiro por integrar una organización delictiva. Según la acusación, estos profesionales facilitaban certificados o exámenes para obtener la credencial de legítimo usuario de armas a integrantes o allegados a la banda de Lucho Cantero. A través de un acuerdo abreviado, fueron sentenciados a 3 años de prisión en suspenso y 10 años de inhabilitación especial.
El fiscal Gastón Ávila explicó en audiencia que ambos formaron parte de una asociación ilícita. Este grupo se dedicaba a generar un circuito de desvío de armas y municiones al mercado ilegal. Los destinatarios eran personas que no reunían las condiciones para ser legítimos usuarios. Entre ellos miembros del grupo delictivo encabezado por Luciano Lucho Cantero.
Asociación ilícita
La organización funcionó entre noviembre del 2021 y octubre del 2024. Entre sus miembros estaba el psiquiatra Marcelo Lemoine. Este médico estaba inscripto en el Registro de Profesionales Habilitados para la Emisión de Certificados Psicofísicos que a través del Sistema Abierto y Federal de Emisión de Certificados Psicofísicos (SIAF). Esta inscripción permite evaluar y declarar la aptitud o no para obtener la Credencial de Legítimo Usuario (CLU) de armas de fuego, contó Ávila.
Para la fiscalía el rol del médico en la organización delictiva fue esencial. Este psiquiatra otorgó certificación psicofísica a personas que eran derivadas por Lucas P., Rodrigo S. o Javier H. — ya imputados en la causa —, sin cumplir el protocolo de Anmac.
Lo acusaron de fraguar el contenido de las certificaciones. Según el fiscal le pagaban para no realizaba la evaluación psicológica, ni el examen audiológico. Este médico declaraba aptas a las personas que no cumplían los requisitos necesarios para obtener la credencial, refiere la imputación.
Otro de los sindicados fue Jorge Fedeli, instructor de tiro con armas largas y cortas registrado ante la ANMaC. Dentro de sus facultades está la de otorgar el certificado de idoneidad en el manejo de armas de fuego.
Para la fiscalía este hombre, en connivencia con otros integrantes del grupo delictivo declaraba aptas a personas que no tenían el nivel requerido de conocimientos técnicos-prácticos en el manejo de armas de fuego.
El fiscal refirió que le completaba las preguntas teóricas en el examen y en ocasiones aprobaba a personas que no habían acertado ningún disparo. “Evaluaba la idoneidad con total liviandad y sin pedir conocimientos teóricos”, refirió el fiscal.
Abreviado
En una audiencia de procedimiento abreviado que tuvo lugar este viernes, ambos reconocieron ser parte de la banda. Consintieron una condena de cumplimiento condicional además de una inhabilitación especial de 10 años. Además, ambos deberán cumplir una serie de reglas de conducta, entre ellas abstenerse de relacionarse con otros imputados.
Tras la evaluación de la propuesta, el juez Facundo Becerra resolvió homologar el convenio. El magistrado condenó al médico y al instructor de tiro por integrar una asociación ilícita dedicada a generar un circuito de desvío de armas y municiones al mercado ilegal.